LA COVACHA en AL SUR DE BABILONIA

Hablamos con Salvador Tiranti, voz de LA COVACHA que arrancó una gira por los barrios previo a la grabación de su cuarto disco que será en julio. Las canciones del sucesor de “Detrás del Cielo” vienen siendo presentadas en vivo para llegar “con más fuerza al estudio”. Salvador adelanta que la nueva producción encuentra a la banda en plena madurez musical, aunque siempre en busca de aprender nuevas cosas. “La Covacha es una escuela y un camino en el que estamos siempre aprendiendo”.

El 2008 se viene cargado de fechas covacheras.
Sí, El 12 de abril en Laferrere arrancamos la gira. La idea es tocar por los barrios para terminar en capital en Julio. Pasaremos por Lomás, San Justo, Pilar, el microestadio de Argentino de Quilmes, Rosario y varias localidades más.

Mucho Gran Buenos Aires.
Sí, es una costumbre nuestra que nos quedó de las giras “de barrio en barrio, de mano en mano” cuando juntábamos útiles y alimentos para comedores. Aparte son todos conocidos y vamos sumando amigos.

ME JUEGO LA CABEZA:

Se viene el cuarto disco de La Covacha. ¿Cómo lo están trabajando?
Estamos haciendo al revés de lo que hicimos con “Detrás del Cielo”, porque a ese disco lo estuvimos preparando casi año y no lo estuvimos presentando en vivo. Pero fue para no sacar algo parecido a “Por el mismo camino…”.
Para el cuarto disco, lo que estamos haciendo es presentar algunas canciones en vivo, porque me parece que la canción se embarra un poquito cuando sale a la cancha y llega al estudio con más fuerza. Aparte, algunas canciones no llegan porque ves la reacción de la gente y decís “no, esto no esta para grabarlo”.
Y muchas se han cambiado a medida que fueron tocadas. Nos pasó que presentamos algunos temas y fuimos modificándolos.
Además, vamos aprendiendo nuevas formas de hacer los álbumes. Ya que uno apareció en esto de la música casi por error lleva a tener que aprender un montón de cosas.

¿Cómo es que sos músico “casi por error”?
Sí, porque los clubes de fútbol me desecharon constantemente (risas). Pasa que nosotros nos juntamos y no sabíamos ni tocar. Por ejemplo, en el primer ensayo nuestro no había ni baterista ni bajista. Entonces era agarrar un instrumento y empezar a aprender. Y así fue como empezamos. Era primero la necesidad de juntarse con la gente que uno quiere, para algo que no se sabía qué, y empezar a tocar.

SOY COVACHERO:

¿Va a haber algún rescate de “Hay que gritar”?, es decir, ¿Alguna canción de aquél primer casete versionada para este nuevo disco?
No, van a ser todas canciones nuevas. ¿Sabes cómo grabamos ese demo? Hicimos una rifa entre el público, y el que ganaba se llevaba el disco.
Y con esa plata empezamos a grabar el demo, cosa que es una locura! Porque que un flaco compre una rifa de una banda que no sabe si le va a gustar!

Además rifaron un disco que no sabían si lo iban a poder grabar…
Claro! Era una estafa en realidad (risas). Igual se grabó y el día que lo presentamos dimos el premio. Ese día tocamos en un lugar que se llamaba “El 24” enfrente del río de Quilmes, que ahora no existe más. Terminamos de tocar a las seis de la mañana cuando estaba amaneciendo. Me acuerdo que el disco se lo ganó un tal Javier de Quilmes.

¿En qué etapa está el cuarto disco?
Todavía falta un poco. La idea es terminar esta gira que es muy grande, después hacer una despedida en capital y meternos a grabar en Julio. Las canciones ya están.
Es como que vamos reafirmando el sonido, porque a medida que pasan los discos vas probando. Y ya llegado el cuarto uno empieza a reconocer su propia voz y sus colores. Como una forma de decir de La Covacha, y eso esta bueno, porque ya sabemos “cómo decimos” y de que forma lo hacemos. Estamos como más seguros. Ya tenemos un aprendizaje.
Por ejemplo, para hacer “Detrás del cielo” pusimos como “capricho” que los productores tenían que ser de la propia banda. Y tanto Licho como Seba aprendieron a hacer ese trabajo complejo, que es el de producir un disco. La Covacha es una escuela y un camino en el que estamos siempre aprendiendo.
Ya juntamos la experiencia de haber tocado en escenarios hechos con cajones de cerveza y otros mucho más grandes.
SACUDRIAN:


La Covacha: Qué nombre rockero que tienen.
El nombre surgió apurado porque íbamos a hacer la primer fecha y no teníamos nombre. Estábamos viajando en el 22 y a Licho se le ocurrió “La Covacha”, y ahí quedó. Pero más que el nombre es el espacio que uno construye para decir las cosas. Eso es más importante que todo. Poder decir, en este mundo nos paramos acá y decimos las cosas de esta manera. Con errores, con buenas o malas pero… sentir eso, que encontraste tu lugar para hablarle a la vida es bastante interesante.

Sitio Oficial de La Covacha: http://www.lacovachera.com.ar/